Debería salir a tomar el aire. Sí,
joder, aquí huele a muerto, qué asco. No, no puedo salir así, la pesada de la
vecina estará mirando por la ventana. Seguro.
Dios, necesito un cigarro.
¿Y si limpio esto? A mi madre no le
gustará que la policía encuentre la casa hecha un desastre. ¿Les he llamado ya?
Sí, cabrón, sí, me meterán en la
cárcel, pero a ti yo te he enviado a la tumba. Venga, tócame ahora, vamos, a
ver si puedes. Ah, no, que ya no se te levanta. Que te jodan a ti ahora en el
infierno. Mira, ya están ahí. Es la hora.
Mónica Prádanos